Cuando se trata de personalidad, los científicos han descubierto que hay cinco rasgos específicos que todo el mundo posee, independientemente de su cultura o género. Estos rasgos son: apertura, escrupulosidad, extraversión, amabilidad y neuroticismo.
El objetivo de este segmento es que las personas adopten su propia personalidad, en lugar de intentar ser alguien que no son. Si no eres extrovertido por naturaleza, no te fuerces a serlo. Si eres neurótico por naturaleza, está bien. Al comprender nuestros rasgos de personalidad, podemos mejorar nuestras vidas.
Los cinco rasgos de personalidad
Franqueza
La apertura se refiere a cuán imaginativa y curiosa es una persona. Si estás de acuerdo con afirmaciones como «Me encanta la aventura» y «Soy imaginativo», entonces se considera que tienes una gran apertura. Conocer su nivel de apertura es importante porque ayuda a determinar cómo emplea su tiempo. Las personas con una apertura alta pueden encontrar felicidad al tachar elementos de su lista de deseos, mientras que aquellos con una apertura baja pueden encontrar alegría en los rituales tradicionales y pasar tiempo con viejos amigos.
Escrupulosidad
La escrupulosidad tiene que ver con cuán organizada y orientada a los detalles es una persona. Si prefiere seguir planes y tiene mucha autodisciplina, entonces se considera que tiene mucha escrupulosidad. Este rasgo es importante a la hora de elegir tareas que se alineen con sus puntos fuertes. Aquellos con mucha escrupulosidad pueden prosperar en tareas rutinarias, mientras que aquellos con poca escrupulosidad pueden sobresalir en trabajos de ventas más creativos y espontáneos.
Extraversión
La extraversión tiene que ver con cómo una persona se orienta hacia las personas y las relaciones. Si te gusta ser el centro de atención e iniciar conversaciones, entonces se te considera extrovertido. Es importante saber si eres introvertido o extrovertido porque ayuda a determinar las personas y los lugares donde prosperas. Los introvertidos pueden preferir unos pocos amigos cercanos y reuniones íntimas, mientras que los extrovertidos pueden disfrutar de estar rodeados de mucha gente y entornos sociales.
Amabilidad
La amabilidad se refiere a cuán empática y amigable es una persona. Si tiendes a confiar en las personas y las haces sentir cómodas, entonces eres muy agradable. Este rasgo juega un papel importante en la dinámica familiar. Las personas muy agradables pueden asumir tareas como planificar fiestas y dar la bienvenida a nuevos socios a la familia, mientras que aquellos con poca simpatía pueden optar por un papel más reservado.
Neuroticismo
El neuroticismo tiene que ver con la facilidad con la que una persona se estresa y su mal humor. Si te estresas con facilidad y tiendes a preocuparte, entonces tienes un neuroticismo elevado. Comprender su nivel de neuroticismo es importante para gestionar su bienestar emocional. Las personas muy neuróticas deben comunicar sus factores desencadenantes a su pareja o a sus seres queridos, permitiendo apoyo y comprensión en momentos de inestabilidad emocional. Conocer los factores desencadenantes, como el yoga o los ejercicios de respiración, también puede ser útil para controlar el neuroticismo.
