Algunas veces las personas hacen preguntas realmente tontas, y aunque amo a estas personas (por lo general son maravillosas y encantadoras), sus preguntas a veces pueden volverse locuras. Es por eso que este artículo es un ruego para que nunca hagas estas cinco preguntas estúpidas. Vamos, comencemos.
Pregunta estúpida número uno: «¿Puedo hablar contigo?»
No estoy bromeando, tengo un filtro de Gmail configurado para mandar inmediatamente a spam cualquier correo electrónico que incluya esa frase «Déjame platicar contigo». ¿Por qué? Porque es una pregunta perezosa. Si le preguntas esto a personas ocupadas, demuestras que solo quieres consejos gratuitos sin hacer ningún trabajo previo. Amo mentorizar a la gente y dar consejos, pero tiene que tener un propósito.
Cuando alguien me pide «platicar» sé que solo quieren absorber toda la energía positiva de la habitación para sus propios intereses. Si deseas tener una entrevista informativa o aprender más sobre lo que hacen, haz una pregunta específica y establece una agenda. Nunca preguntes «¿Puedo platicar contigo?». Por favor, por favor, por favor, pregúntame algo específico que quieras abordar.
Pregunta estúpida número dos: «¿Algo que puedas encontrar en Google?»
¿Sabes cómo llegar a Starbucks en Burnside? Permíteme que lo busque en Google por ti. ¿Sabes cuándo salió la canción «Bye Bye Bye»? Déjame que lo busque en Google por ti. ¿Sabes si los pasteles de frases son sin gluten? Deja que lo busque en Google por ti. No seas flojo. Si tienes una pregunta que Google podría responder, búscala primero en Google. Busca dos veces si es necesario, y mira más allá de la primera página de resultados.
Si después de todo eso no encuentras nada, entonces puedes preguntar a alguien, pero asegúrate de mencionar que hiciste una búsqueda en Google y no encontraste la respuesta. Nunca preguntes algo que puedas encontrar en Google primero. Este artículo no fue patrocinado por Google, aunque YouTube es propiedad de Google, así que supongo que en cierta forma, fue patrocinado por Google. De todos modos, deberías usar Google, es gratis y es la mejor manera de evitar preguntas tontas.
Pregunta estúpida número tres: «¿Puedes ser mi mentor?»
Lo sé, lo sé, tienes buena intención. Sé que te encanta alguien en el mundo empresarial y desesperadamente quieres aprender de esa persona. Pero preguntarle directamente a alguien si puedes ser su aprendiz no es la manera de hacerlo. Los mentores deberían ser ellos quienes pregunten si quieres ser su aprendiz. La mentoría es un asunto serio. Yo trato a las pocas personas a las que mentorizo con increíble importancia. También es algo que no ofrezco a la ligera.
Si obtienes un mentor que responde inmediatamente con un sí, puede que no sean tan serios como esperas. En lugar de preguntarle a alguien si puede ser tu mentor, muéstrale por qué mereces ser su aprendiz. Haz preguntas muy específicas y solicita consejos concretos. Luego, realiza un seguimiento, toma en serio los consejos y demuéstrale que estás comprometido. No necesitas tener una relación formal de mentoría para aprender de alguien, así que nunca preguntes «¿Podrías ser mi mentor?». Los mentores adecuados te lo preguntarán a ti.
Pregunta estúpida número cuatro: «Algo que está en su sitio web o Wikipedia»
Si vas a una entrevista de trabajo y preguntas algo que fácilmente podrías encontrar en la página web de la empresa o en Wikipedia, no parecerás inteligente y estarás haciendo perder el tiempo a la persona que tiene que responder.
Si vas a una cita y preguntas algo que está en el perfil de citas en línea de la persona, parecerá que ni siquiera te importó leerlo antes de la cita. Así que investiga y nunca preguntes algo que está en su sitio web, perfil o Wikipedia.
Pregunta estúpida número cinco: «Cualquiera de estas preguntas estúpidas que la gente hace en Internet»
No pude elegir una última pregunta porque hay muchas preguntas absurdas que la gente realmente ha escrito en Google. Hay múltiples personas que han hecho estas preguntas en Internet, así que nunca preguntes «¿Cómo cuido de mi mascota patata?». ¿Los esqueletos son reales o inventados? ¿Cómo perdí peso sin moverme? Me mordió una tortuga cuando era joven, ¿debería seguir bebiendo jugo de naranja? ¿Creen que la NASA inventó el trueno para encubrir el sonido de las batallas espaciales? ¿Creen que si Michael Jackson no hubiera muerto, todavía estaría vivo hoy? ¿Qué tan grande es un océano específico? ¿Cómo se quita una mancha de espagueti de la ropa interior? ¿Cuánto Listerine se necesita para embriagarse? ¿Hay un hechizo para convertirse en sirena que realmente funciona? ¿Qué sucede si pintas tus dientes de blanco con esmalte de uñas? ¿Quieres saber la única respuesta a todas estas preguntas? Es simplemente no. No, no, jamás, a todas estas preguntas sin sentido.
