Conversación interesante: 5 tips infalibles

Escrito por Alice Martin

¿Alguna vez te has quedado sin palabras en medio de una conversación? Es un momento incómodo en el que tu mente se queda en blanco y no sabes qué decir. Puedes sentir cómo la otra persona busca a alguien más con quien hablar. ¡Pero no te preocupes! Aquí te presento cinco consejos para asegurarte de que nunca vuelvas a quedarte sin nada que decir en una conversación.

1. Observa tu entorno

Cuando te encuentres en esa situación en la que tu mente está en blanco, observa lo que te rodea y encuentra algo interesante que puedas mencionar. Por ejemplo, puedes decir: «¿Sabes qué me recuerda a esto?». Esta simple frase puede abrir nuevos hilos de conversación. Además, utilizarla como continuación después de que alguien termine de contar una historia puede ser una excelente manera de interactuar con tus amigos.

2. Haz preguntas abiertas

En lugar de hacer preguntas cerradas que solo obtienen respuestas de una palabra, trata de hacer preguntas abiertas. Por ejemplo, en lugar de decir «¿Te gusta Toronto?», pregunta «¿Cómo te gusta Toronto? Me encantaría saber más al respecto». De esta manera, invitas a la otra persona a hablar sobre sus gustos e intereses, lo que abrirá más hilos de conversación. También recuerda que hacer la pregunta «por qué» es una buena manera de profundizar en la conexión con la otra persona.

3. Utiliza preguntas de reactivación

Si la conversación se estanca por completo, utiliza preguntas de reactivación. Estas son preguntas que no tienen relación directa con el tema actual, pero que pueden revitalizar la conversación. Algunos ejemplos son: «¿Cómo se conocen todos aquí?» si estás en un grupo nuevo, o «Cuéntame un poco de ti» si estás hablando con una persona en particular. Estas preguntas abren la puerta a nuevos temas y te permiten descubrir los intereses de la otra persona.

4. Haz comentarios halagadores

Si observas algo especial en la otra persona, puedes hacer un comentario halagador. Por ejemplo, si ves que es simpática, puedes decirle «Tienes cara de ser muy buena con los niños». Si aciertas, es muy probable que la otra persona se abra y te cuente más sobre el tema. Incluso si te equivocas, puedes hablar de lo que te dio esa impresión inicialmente. De cualquier manera, tendrás nuevo material de conversación.

5. Deja que la otra persona tome la iniciativa

En lugar de preocuparte por quedarte sin cosas que decir, permite que la otra persona mueva la conversación hacia adelante. Si te sientes cómodo con el silencio y mantienes el contacto visual, es muy probable que la otra persona comente algo o te haga una pregunta. Otra técnica es repetir las últimas palabras que la otra persona dijo, lo que invita a que continúe hablando. A veces, permitir que la otra persona tome la iniciativa puede llevar a conversaciones más interesantes y profundas.

¡Y ahí lo tienes! Cinco consejos rápidos y fáciles que puedes utilizar hoy mismo para asegurarte de que nunca te quedes sin nada que decir en una conversación. ¡Espero que hayas disfrutado de este artículo y nos vemos en el próximo!